Con cauta satisfacción
El Portland jugará la próxima fase europea frente al Hamburgo y al FCK Handbold- El club navarro iniciará la fase con 2 puntos al igual que Chehovskie mientras que el Hamburgo tendrá 4 y el conjunto danés, 0- El Portland iniciará a mediados de febrero la fase con dos partidos en casa; luego, viajará a Hamburgo y Copenhague.
Ni lo mejor dentro de las opciones que tenía, ni tampoco lo peor. El Portland puede quedar satisfecho con el resultado que ayer tuvo en el sorteo de la fase principal de la Liga de Campeones y que le emparejó, además de con el Chehovskie ruso (que le acompaña de la ronda anterior y con el que ya no tendrá que jugar, pues se cuentan los puntos de sus duelos anteriores), con el Hamburgo alemán y el FCK Handbold danés.
No es un resultado como para tirar cohetes ni asegura al equipo navarro el pase a cuartos. Al contrario. Pero sí que el club navarro ha tenido la suerte de no verse las caras con los poderosos Kiel y Barcelona, dos clubes que formarán un grupo de la muerte con el Ciudad Real y el Gudme danés.
El del Portland es un grupo duro, igualado, de calidad y en el que los navarros parten con una ligera ventaja sobre el club danés -que pasa sin puntos de la anterior ronda-, empatado con el Chehovskie (a 2) y en desventaja con el potente Hamburgo, vigente subcampeón europeo y claro favorito a ocupar una de las dos plazas para la siguiente ronda al iniciar esta fase ya con 4 puntos.
Al margen de ver cómo llegan a estos partidos unas plantillas con numerosos internacionales y tras la disputa del Mundial, la clave que dará la medida real de las posibilidades del Portland estará en los dos partidos que jugará como local.
Serán los que abran la fase el segundo y tercer fin de semana de febrero. Si los gana, las opciones navarras se amplían. Más aún cuando el club albiazul cerrará la fase en Copenhague, en la pista de un FCK Handbold que, lastrado por la ronda previa, podría verse para entonces (entre el 4 y el 8 de marzo) sin opciones.
Si no gana los dos duelos en casa, y siempre pendiente de la fase que vaya haciendo el Chehovskie, el Portland se complicaría mucho el futuro y se vería obligado a puntuar en el duelo que jugará el último fin de semana de febrero en Hamburgo, un espectacular pabellón multiusos que el Portland ya conoció en la pasada edición, cuando el club alemán le eliminó en su camino hacia la final.
Ni lo mejor dentro de las opciones que tenía, ni tampoco lo peor. El Portland puede quedar satisfecho con el resultado que ayer tuvo en el sorteo de la fase principal de la Liga de Campeones y que le emparejó, además de con el Chehovskie ruso (que le acompaña de la ronda anterior y con el que ya no tendrá que jugar, pues se cuentan los puntos de sus duelos anteriores), con el Hamburgo alemán y el FCK Handbold danés.
No es un resultado como para tirar cohetes ni asegura al equipo navarro el pase a cuartos. Al contrario. Pero sí que el club navarro ha tenido la suerte de no verse las caras con los poderosos Kiel y Barcelona, dos clubes que formarán un grupo de la muerte con el Ciudad Real y el Gudme danés.
El del Portland es un grupo duro, igualado, de calidad y en el que los navarros parten con una ligera ventaja sobre el club danés -que pasa sin puntos de la anterior ronda-, empatado con el Chehovskie (a 2) y en desventaja con el potente Hamburgo, vigente subcampeón europeo y claro favorito a ocupar una de las dos plazas para la siguiente ronda al iniciar esta fase ya con 4 puntos.
Al margen de ver cómo llegan a estos partidos unas plantillas con numerosos internacionales y tras la disputa del Mundial, la clave que dará la medida real de las posibilidades del Portland estará en los dos partidos que jugará como local.
Serán los que abran la fase el segundo y tercer fin de semana de febrero. Si los gana, las opciones navarras se amplían. Más aún cuando el club albiazul cerrará la fase en Copenhague, en la pista de un FCK Handbold que, lastrado por la ronda previa, podría verse para entonces (entre el 4 y el 8 de marzo) sin opciones.
Si no gana los dos duelos en casa, y siempre pendiente de la fase que vaya haciendo el Chehovskie, el Portland se complicaría mucho el futuro y se vería obligado a puntuar en el duelo que jugará el último fin de semana de febrero en Hamburgo, un espectacular pabellón multiusos que el Portland ya conoció en la pasada edición, cuando el club alemán le eliminó en su camino hacia la final.
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